Hoy hablaremos de uno de los músicos más importantes del Romanticismo, cuyas obras son escuchadas en la actualidad y son de vital importancia.
RICHARD WAGNER 1813 -1883
Su objetivo era representar la obra de arte en su totalidad; una obra que incluyera todas las artes en sus óperas.
Tanto sus obras como sus óperas introducen novedades que hacen de su estilo único y original; innovaciones en sus obras, y una plantilla completa de músicos, es lo que se puede apreciar en sus óperas.
Dueño de una personalidad polémica e imponente rebeldía, que lo hacía merecedor de los más controversiales sentimientos y emociones. La música del siglo XIX tomó un nuevo rumbo, gracias a Richard Wagner, llevó su propuesta a todas partes y a todas las generaciones; su reforma operística y la obra de arte total, no llegó a desarrollarse totalmente, pero fue la ventana que le abrió las puertas a una corriente entusiasta de culto, a tal punto que se llegó a tachar a Wagner de nazi.
Gran respetuoso de la tradición sinfónica alemana, expuesta en los ejemplares preludios de Tristán, Tannhäusser o la Marcha fúnebre de Sigfrido. Simultáneamente intentó incluir la voz humana, como uno más de los instrumentos que conforman la orquesta; lo que representa gran dificultad para cantarlo y enorme capacidad física para interpretarlo, por lo extensas que son las óperas.
La Tetralogía, El anillo del nibelungo, es indudablemente su obra más resaltante y que está compuesta por: cuatro óperas, La Valquiria, El oro del Rin, El ocaso de los dioses y Sigfrido.
Representados en el festival anual que desde 1876 se celebra en Bayreuth, Alemania.
Durante los siguientes doce años Richard Wagner permanece en el exilio, debido a una falla cardiaca muere el 13 de febrero de 1883.
No hay comentarios:
Publicar un comentario